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martes, 8 de julio de 2014

Una Nueva Aventura

Una nueva aventura comienza.


Se cierran puertas que guardan momentos especiales, inolvidables, momentos que te hacen crecer como persona, momentos sin los cuales no serias lo que eres ahora, no habrías llegado al punto en el que te encuentras, momentos de risas, dolor, llanto, carcajadas. 

Y es que la vida está formada por momentos, unos mejores, otros peores, pero los cuales nos hacen avanzar e ir creciendo cada día un poco más.

Llega un punto en tú vida que decides cerrar una puerta y guardar una gran parte de estos momentos en tu corazón. Porque los guardas, no los olvidas, forman parte de nosotros y en nosotros seguirán estando. Aunque no estén tan presentes, aunque algunas veces no nos acordemos, pero están ahí. 
Tú lo sabes. Yo lo sé.


Esos momentos no desaparecen, no se pueden esfumar, sobre todo cuando pesan tanto y han significado tanto. Cuando han formado parte de una etapa de tu vida tan importante, en la que sin darnos cuenta necesitamos sentirnos queridos y tener una rama en la que apoyarnos. Es una etapa en la que nuestra personalidad queda fijada y esos momentos han hecho de mí una mejor persona, me han enseñado que hay que contar hasta tres, que es mejor hablar las cosas y no actuar como una cría, que hay que ponerle ironía a la vida, que muchas veces nos ahogamos sin darnos cuenta que hacemos pie... Son tantas cosas, que es imposible olvidar.
Tú lo sabes. Yo lo sé.

 Cuando esa puerta se cierra ves ante tí un pasillo lleno de otras puertas. Puertas nuevas, con nuevas aventuras y experiencias por descubrir. Vas caminando por el pasillo y unas te atraen más que otras, hasta que llegas a una cuya luz te atraía desde el principio, como si te estuviera llamando, es una luz más potente que las demás. 


Cuando llegas a ella te deslumbras, entornas los ojos para ver que hay, ¿qué puede haber dentro de esa puerta que transmita tanta luz?
Das un paso hacía ella, te vas acostumbrando a su intensidad, pero aún así te resistes, porque es algo nuevo y no sabes qué esperar. El poder de la luz es demasiado atrayente y sin darte cuenta te imaginas cruzando la puerta y creando nuevos momentos. Mientras imaginas tus pies se mueven sin que tu mente se percate de ello y poco a poco vas entrando y dejando que la luz te envuelva.
Aún así sientes miedo, es algo distinto, lo poco que consigues ver te atrae, pero no es a lo que estabas acostumbrado, sabes que va a ser diferente, y en parte difícil, pero te dejas llevar, no lo puedes evitar y poco a poco continuas entrando....



Sonríe y se Feliz.

2 comentarios:

  1. Me ha encantado tu entrada!

    A mi personalmente no me asustan bastante los cambios, pero con el tiempo he descubierto que no tienen por qué ser a peor, sino a mejor.

    Andrea, =)

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  2. Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.

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